¿Qué significa el término «garantía»?
No es necesario presentar la factura para hacer valer una garantía.
Los fabricantes y proveedores pueden acordar devoluciones diferentes a las garantías.
Cualquier consumidor puede reclamar al fabricante o proveedor la garantía de un producto adquirido siempre que esté dentro del plazo y se den las circunstancias que justifiquen la solicitud. Esta garantía puede implicar el cambio del producto, la devolución del dinero o la reparación del mismo.
La Ley 1480 del 2011, también conocida como Estatuto del Consumidor, regula los derechos y obligaciones de consumidores, productores y proveedores en una relación de consumo. Según esta norma, la posibilidad de devolver o cambiar un producto debido a una garantía solo se aplica en caso de falla, daño o falta de conformidad del producto en términos de calidad, idoneidad y seguridad, o en caso de información incorrecta proporcionada al consumidor.
¿Qué se entiende por garantía?
Para comprender en qué situaciones se puede solicitar un cambio o devolución de un producto, es importante conocer la definición de garantía que ofrece el Estatuto del Consumidor en su artículo 5:
«Obligación temporal, compartida entre el productor y el proveedor, de garantizar el buen estado del producto y su conformidad con las condiciones de calidad, idoneidad y seguridad legalmente exigibles o prometidas. La garantía legal no implica un costo adicional al precio del producto».
En resumen, la garantía permite que el consumidor afectado reclame al proveedor, productor o distribuidor la compensación por recibir un producto defectuoso, dañado o que no cumple con las condiciones de calidad, idoneidad y seguridad ofrecidas.
Esta reclamación puede incluir:
- Cambio del producto.
- Devolución del dinero.
- Reparación del producto.
No es necesario presentar la factura para hacer valer una garantía.
«La presentación de la factura no debe ser un requisito para que el consumidor ejerza sus derechos».
El artículo 27 de la Ley 1480 del 2011 establece que el productor o proveedor debe proporcionar al consumidor una constancia detallada de la transacción de consumo realizada. Esta constancia puede ser una factura o un documento equivalente en formato físico o electrónico. Sin embargo, la ley especifica que la presentación de la factura no es un requisito para que el consumidor haga valer sus derechos.
Los fabricantes y proveedores pueden acordar devoluciones diferentes a las garantías.
La Ley 1482 del 2011 establece las circunstancias en las que un productor o proveedor debe cumplir con la garantía de un producto, pero no menciona cuándo pueden aceptar realizar devoluciones o cambios de productos que no estén cubiertos por la garantía. Un ejemplo de esto es cuando el fabricante o vendedor permite el cambio de un producto bajo condiciones o restricciones establecidas por ellos mismos, como en el caso de los regalos.